Hola a todos!!!
Hoy escribo para recomendaros un libro que empecé a leer hace poquito. Se llama "El poder de la esposa que ora" por Stormie Omartian de la editorial Unilit.
Debo de confesar que no soy adicta a este tipo de libros, de hecho rara vez los leo... Pero hace unos días mi suegra me lo regaló y como no tenía otro libro en mi mesita de noche decidí darle una oportunidad... y me gustó.
Os daré una idea de las cosas que me gustaron y que encontré bastante edificantes así que quiero compartirlas con vosotr@s.
El primer punto al que se refiere el libro es al PODER. OJO!! a la aclaración que hace, poder no es control sobre tu pareja, no somos sus madres o padres, somos su pareja, su igual. Nuestro poder reside en la autoridad que tenemos sobre todo lo que puede dañar a nuestro matrimonio o pareja. No podemos controlar a nuestra pareja pero si consolar y confortar a nuestra pareja cuando esta herido o preocupado, podemos dar el primer paso a la reconciliación en vez de permitir que una pared invisible se interponga entre nosotros, buscar la buena comunicación, el perdón y evitar el resentimiento cuando nos hieren porque antes del YO, está el NOSOTROS y cuando nos casamos sacrificamos nuestro orgullo propio para formar un matrimonio... y ese es el que nunca debe salir herido.
Otro punto que me pareció esclarecedor es que el matrimonio es una unidad, al casarnos nos hicimos uno en cuerpo y alma, por eso no se puede orar por uno mismo, por una mitad, sin orar por la otra. No se puede orar por un cambio de actitud o por una ayuda a tu pareja, si no hay un cambio en uno mismo primero. El ejemplo que pone es que ella estaba herida por el temperamento de su esposo, pero para que hubiese cambio en él, también tenía que haber un cambio en ella. En su capacidad de perdón, y en sus reacciones ante ese temperamento. Cuando ella cambió, empezó el cambio en su marido.
El último punto que quiero resaltar hoy es que la oración es un acto de "amor y sacrificio, sin egoísmo e incondicional" de parte de uno mismo. Muchas veces hacemos las cosas por nuestra pareja pero nos sentimos dañados si nuestra pareja no hace lo mismo por nosotros. Sentimos que no somos correspondidos de la misma forma y nos parece injusto. En esos momentos debemos recordar que el amor de Dios es así con nosotros. Por mucho que nosotros le fallemos El sigue creyendo en nosotros y no se da por vencido, El hace su parte y espera que en algún momento nos demos cuenta de su amor y se produzca el cambio en nosotros. A veces no cambiamos, otras si. Pero para que se produzca, debemos ser constantes, debemos ser pacientes, y sobretodo debemos amar de forma completa y sin condiciones.
Todo esto lo saque solo del primer capitulo... y no son capítulos largos así que estoy deseando continuar aprendiendo y continuar mejorando en mi matrimonio.
Vosotros habéis leído o aprendido algo revelador para vuestro matrimonio? Si es así compartirlo con nosotros por favor.
Saludos,
Ana
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